80 ILEGIBLES (71 de 80) – Porche y limonada
–Hay una niña que me pega en el colegio, abuelo. –¿Una niña te pega? ¿Las niñas ya sois iguales que los niños? –… –La próxima vez que vaya a por ti, ¿sabes qué tienes que hacer? –¿Qué, abuelo? –Se la...
View Article80 ILEGIBLES (72 de 80) – Material masturbatorio
Es una lata, pero a veces hay que hacerlo. Me levanto del escritorio y voy a por el cubo y la fregona. En verano, a veces incluso es mejor darse una ducha después de masturbarse; pero antes hay que...
View Article80 ILEGIBLES (73 de 80) – Ideologito
¡Hola a todos y a todas, soy Ideologito, la mascota de tu ideología adulta, concienciada y responsable! Hoy, un nuevo consejo para sonar fetén en esas reuniones adultas, concienciadas y responsables...
View Article80 ILEGIBLES (74 de 80) – Ansiedad
Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad. Ansiedad....
View Article80 ILEGIBLES (75 de 80) – Relato detallado sobre cómo –a un nivel...
Debía tener cuatro años, y no es que fuera un niño muy listo. Abrí los ojos, impresionado: veía una peli en la tele. Mi madre (o quizá mi padre), rió ante mi reacción. Dijo: –Niño, todo lo que se ve en...
View Article80 ILEGIBLES (76 de 80) – Mira el reloj
Hay una mujer sola, ahora mismo, sentada en una terraza de Roma. No es necesariamente como quizá ya la has imaginado (morena, pelo largo, vestido suntuoso, melancolía), pero está ahí, seguro. No te...
View Article80 ILEGIBLES (77 de 80) – El Instagram de Petronila
A veces lo he hablado con amigos. El Instagram de Petronila siempre me ha hecho pensar. Su última publicación, por ejemplo, es un video de ella saliendo a cámara lenta de la piscina. El ángulo de...
View Article80 ILEGIBLES (78 de 80) – Más real
Soñé que mis padres envenenaban a la gente. Mis padres, que sólo han hecho que currar y preocuparse, como si la vida no fuese más que un trámite inevitable, conocían toda clase de venenos. Los que...
View Article80 ILEGIBLES (79 de 80) – Felicidad
Un monitor de esplai, poco tiempo antes de morir de una indigestión, nos hablaba siempre de la felicidad. Era un esplai de verano. Niños y niñas de once años. Aún no sabíamos de qué iba ese rollo del...
View Article80 ILEGIBLES (80 de 80) – Preludio
El fulano, el zanguango, el petimetre, con una edad aún lejana a la senectud, pero a buena distancia de la primera juventud, se viste, se disfraza de adulto. Incluso aprende a anudarse una puñetera...
View ArticleMorder
No siempre saludo a los vecinos. Soy bastante despistado. Según cómo, es probable que me quede mirándote el culo. Tengo escasas habilidades sociales. Se confunde habitualmente mi timidez con soberbia....
View ArticleForzar la magia
No sé por qué recuerdo ciertos días con tanta claridad y satisfacción. No suele ser porque pasara nada especial o chocante en ellos. Cuando se trata de fechas teóricamente extraordinarias, de las que...
View ArticleUn pedazo de carne
Le cogió el gusto a lanzar puñetazos contra una de las paredes de la cabaña. Siempre la misma pared de una habitación vacía, puede que repleta de fantasmas. La cabaña abandonada. La pared de yeso cada...
View ArticleUna, dos, tres
Entro en las instalaciones de la piscina. Digo entro, pero de todo esto hace más de veinte años. Nunca sé si enseñar el carné de socio, eso siempre me incomoda. Tengo dieciséis años. La timidez me ha...
View ArticleUna vida estética
Sonora. Los pensamientos de J. La habitación de J. acapara el mundo privado de J.; intenta ser un reducto fortificado contra el enemigo: los padres, el mundo. Los profesores. El instituto es el trabajo...
View ArticleDouble
Esto no puede tener interrupciones de ningún tipo, porque lo recuerdo como un bloque compacto a lo Kerouac, y así se servirá. Un sábado no hace tanto tengo una discusión absurda con mis padres de la...
View ArticleQuímica en ruta
Atravesar el desierto de Sonora ha dado lugar a no pocas siestas involuntarias al volante. La gente se queja del embotamiento que te puede provocar una mala siesta, pero los camioneros despiertan a...
View ArticleEl placer del laberinto
Creo que hay esencialmente dos clases de consumidores de libros. Los que compran para leer y los que los compran sin más, en fechas señaladas. Los primeros leen, y los segundos regalan libros nuevos...
View ArticleNoche de chicas
No pienso contestar a sus preguntas una a una, así que tendrá usted que tragarse todo el tocho, señorita P. Puede que todo quede contestado, pero si falta algo, tenga en cuenta que no será por...
View Article
More Pages to Explore .....